Para protegerse del sol y hacerse notar
En los años sesenta, Pratic comenzó a colorear las calles de la ciudad con sus toldos de capota, los icónicos toldos de sol para tiendas de forma redondeada y de colores llamativos. Incluso si actualmente el producto ha evolucionado dando vida a nuevos modelos con un diseño más esencial, los toldos de capota siguen siendo los más vendidos.
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Todo ello mérito de su versatilidad y, sobre todo, de la posibilidad de personalizar el toldo con colores, logotipos y letreros – actualmente se diría, en línea con la imagen coordinada de la marca. A lo largo de los años, los toldos de capota para tiendas han cambiado: la estructura ha sido rediseñada utilizando el aluminio, una garantía de ligereza y duración, mientras que los componentes son totalmente en acero inoxidable, más resistentes a los agentes atmosféricos. Finalmente, es cada vez más amplia la gama de tejidos disponibles, entre lonas acrílicas y lonas que dan sombra de PVC. Realizado a medida, el toldo de capota puede estar equipado con una manipulación automática o manual.
Entre las numerosas propuestas de Pratic, los toldos de sol para tiendas más versátiles son los de caída vertical con caja. Hechos a medida, con unas dimensiones que abarcan de 400 a 950 centímetros de anchura y de 300 a 500 centímetros de profundidad, ocupan un espacio mínimo y ofrecen el máximo rendimiento. De hecho, cuando están abiertos, los toldos para tiendas externas no dejan filtrar ni siquiera un rayo de sol: una ventaja sobre todo para las actividades comerciales que tienen muchas vitrinas, y, por consiguiente, se encuentran con locales difíciles de refrescar en verano y mercancías perecederas, que se estropean o se destiñen más deprisa.
Una amplio abanico de personalización tanto para la lona, que puede ser estampada con logotipos y letreros, como para la caja, pequeña y discreta para responder incluso a la normativa municipal más restrictiva. Los perfiles de aluminio y la caja se pueden colorear a voluntad: la paleta está compuesta por los ocho colores clásicos de Pratic, más los treinta ulteriores colores Tiger, elaborados junto a arquitectos y diseñadores. Una calidad siempre al máximo nivel, que garantiza elevados estándares antideterioro, brillo del color, así como facilidad de limpieza y mantenimiento.